http://www.youtube.com/watch?v=287o_FNZfNcAgua....con ella he recibido el nuevo año y también he celebrado mi cumpleaños. Todo un bautismo de energías renovadas y de sueños e ilusiones por cumplir.
Como alguien me dijo en un sms..."Que todo cambie en tu vida y tus sueños dejen de serlo".
;-)
Asi espero que sea...jamás habia pasado un año nuevo lejos de casa, jamás habia celebrado mi cumpleaños fuera de casa. Todo habia sido siempre tan tradicional, tan familiar...que el "salto" ha sido abismal. Tanto como que he estado acompañada del ser más especial que jamás pude imaginar que llegaría a mi vida.
Paz, sosiego, tranquilidad, silencios, aire puro, inspirar, expirar, respirar, ver, intentar guardar instantáneas de cada segundo vivido. Paseos por la playa donde las olas llegaban con lentitud, como si no quisieran que tiempo pasara por ellas....aire que revolvía las bufandas y las balanceaba como si fueran cometas asidas a mi cuello y que dejaban volar la imaginación...olas rompiendo contra las rocas de los espigones y que dejaban a su libre albedrío las gotas que emanaban de los impulsos y que con total libertad caian en mi cara y en mi camiseta....
Amaneceres cargados de nubes que se aferraban a las montañas que adornaban la lejanía de mi ventanal, para dar paso instantes después a un cielo azul y clarividente, donde podia tocar cada pedazo de nube que el viento iba dejando en su caminar. Brisa templada y cálida, que me hacia sentir que cada segundo, que cada latir, era un instante preciso y precioso de vida que se merecía ser vivida sin desechar una sola milésima de segundo.
Y, al mirar hacia un lado...estabas tú. Con tu sonrisa, con tu gesto de paz, con tu sosiego que penetraba hasta el rincón más recóndito de mi alma, de ese alma que no sabía siquiera que existía algunas veces y que hacías que la sintiera y la presintiera en cada paso que dábamos juntos. Con tus ganas, tu fuerza, tu ilusión, tu mirada brillante de niño con la ilusión recién estrenada en cada amanecer. Con tus manos, firmes y proveedoras de seguridad y de calor. Con tus brazos, guaridas seguras de mis sentimientos y de mis miedos. Miedos que desaparecían en el preciso instante en que me perdía en ellos. Y con tus sueños, que a ratos velaba con la única intención de que nada ni nadie te quitara ni un solo segundo de descanso.
Bienvenido, año nuevo...bienvenida, vida.
